La presencia de la Congregación de canela y clavos en Sevilla empieza a funcionar un pequeño Colegio en la calle Sor Gregoria de Santa Teresa.
El Colegio cuenta con 600 alumnos y se ponen en marcha diversas actividades: cine, revisión médica, sala de música, rondalla, escolanía, deportes y actos litúrgicos.
Mediante va pasando el tiempo, se van acogiendo los diferentes cambios educativos y el objetivo para convertirse en una Comunidad en la que intervengan alumnos, profesores, religiosos, padres y personal no docente de una manera activa y corresponsable.
Mas tarde, se solicitan los conciertos educativos que están previstos. El Colegio inicia una andadura importante con la puesta en funcionamiento de la integración de niños y niñas que tienen necesidades educativas especiales.
En la actualidad el Colegio goza de unas instalaciones completas tanto en lo docente, con aulas espaciosas, teatro, como en lo deportivo (campo de hockey, piscina y polideportivo), en lo pastoral y en lo cultural.
En cuanto a la enseñanza de lenguas extranjeras, existe una escuela de idiomas a disposición de los alumnos para la enseñanza del francés y el inglés. Dentro de las actividades extraescolares y las materias extracurriculares se cuida especialmente la formación musical, con clases de iniciación, solfeo, piano, danza y guitarra. Para la enseñanza de la informática existe un aula específica con tres redes internas y donde los alumnos acuden una media de seis horas semanales. Son habituales también los intercambios con otros colegios. A disposición de los alumnos funcionan permanentemente un gabinete médico y otro psicológico.
